Un poder de representación médica también es conocido como un poder salud. Es un documento en el que un Director nombra a un agente para poder hablar del principal en cuanto a tratamiento médico, si el director no puede ejercer "capacidad decisional". En otras palabras, el agente sería tomar decisiones médicas por el principal, si el director no es médicamente capaz de hacerlo. Como el poder financiero, el poder médico es un documento muy útil y muy potente, por lo que debe estar redactado con cuidado y sólo después de que el director ha dedicado una gran cantidad de pensamiento a ella.
Como potente es un documento que, el poder médico no permite el agente dirigir el tratamiento médico del principal contra los deseos del Director si el principio es mentalmente capaz de tomar sus propias decisiones. Como el principal tiene esta capacidad, él o ella aún conserva el derecho a tomar sus propias decisiones médicas acerca de lo que es mejor para ellos.
Generalmente se aconseja tener un agente alternativo, o "backup", acaso el original uno no puede o no funcionará. Sin embargo, generalmente no es una buena idea tener co-agents porque pueden estar en desacuerdo y también porque generalmente prefieren tratar con una persona que tiene autoridad para tomar decisiones profesionales médicos.
Un problema común que surge con respecto a los poderes médicos es los requisitos de confidencialidad de HIPAA – la Health Insurance Portability y Accountability Act de 1996. Cualquier poder médico debe asegurarse que cumple con los requisitos de HIPAA.
La autoridad de un agente a actuar bajo un poder de representación médica termina tras la muerte del principal; el agente dimisión, incapacidad, incapacidad o falta de voluntad para actuar; o revocación del Director del poder médico.